La importancia de hacer comunidad

IMG_4025Desde hace ya unos años, la sociedad andaluza está dejando de lado su tradición de sociedad con fuerte carácter comunitario y empieza a convertirse en una sociedad más individualista, competitiva e insolidaria. La gente ya no conoce a sus vecin@s, no sienten el espacio común como propio ni lo cuidan, apenas se intercambian saludos por la calle, la prisa y el estrés están en el ambiente y las redes sociales en los móviles entretienen esos momentos de espera en el supermercado, la panadería o en el autobús. El trabajo durante el día y el poder de obnubilación de las televisiones se llevan la mayor parte del tiempo y energía de nuestras poco preciadas vidas.

La buena noticia es que en algunas partes de Andalucía, aun quedan resquicios de esa vida más comunitaria y que hay que mimar y mantener con la esperanza de crear modelos que puedan ser replicados en más barrios y pueblos de Andalucía. Una sociedad que cuida su comunidad, tendrá muchas mas opciones de no solo sobrevivir, sino de superar con solvencia y tranquilidad situaciones que amenacen su supervivencia.

 

IMG_2747Sin embargo el modelo de sociedad actual o hacia al que vamos encamind@s, no tendría mucho campo de acción para solventar una crisis como sociedad. Pongamos un ejemplo; en caso de sequía o de contaminación del agua potable de una ciudad como Granada, el comportamiento de una sociedad que ha cuidado y mantenido un carácter comunitario seria el de asegurarse que todas las personas que conforman esa comunidad tuvieran agua potable embotellada suficiente para que nadie pasase sed, habría un uso muy eficiente del agua para mantener a la comunidad abastecida el mayor tiempo posible. La comunicación y la empatía entre los miembros de esa comunidad estarían por encima del pánico colectivo que una situación así puede causar. Muy distinto sería el comportamiento de la población en un modelo de sociedad individualista. La gente acumularía el agua necesaria para si mismos y su familia sin contar con las necesidades y recursos de sus vecin@s. Este individualismo conlleva también un proceso deshumanizador, que tiene como resultado el visualizar a tu vecin@ como un rival o enemigo en vez de verlo como otro ser vivo que merece ser respetado. La gente acudiría a los supermercados a comprar el máximo número de garrafas de agua posible, encerrarse en sus casas y no abrir la puerta a nadie. El miedo y la desconfianza tan implantadas en nuestra sociedad por la mayoría de los medios de comunicación, crearían una situación de tensión que posiblemente diese lugar a violencia, al principio contenida pero que con el paso del tiempo podría convertirse en un sálvese quien pueda.

CAMINOSLa intención de esta reflexión no es la de crear alarma sino mas bien la de despertar conciencias y abrir la puerta hacia un camino divertido, creativo y enriquecedor para volver a vidas mas comunitarias que ayuden a convertir las urbanizaciones en barrios y a las personas en seres humanos y no en robots. Hay muchas formas de hacer comunidad pero eso ya depende de vuestra creatividad. ¡Seguimos transicioneando amig@s!.